Kliksberg: “La inclusión social permitirá potenciar el sector privado”

El padre mundial de la Gerencia Social aboga por la responsabilidad empresarial como motor de desarrollo en el Perú. Defiende el movimiento de los ‘indignados’.

¿Qué se necesita para llevar a cabo la responsabilidad social

Son cinco puntos muy concretos: buenas políticas de personal, con salarios dignos, posibilidades de progreso o cero discriminación de género (muy alta en la región); Además del equilibrio familia-empresa. En segundo lugar, se debe hacer juego limpio con el consumidor, con productos de calidad y a buen precio; proteger el medio ambiente y ser un actor importante contra la contaminación; ser transparente, no falsear balances, tener un buen gobierno corporativo; y por último una empresa con responsabilidad social se compromete con grandes causas de interés público.

¿Cómo lograr intervenir en políticas de Estado?

En países como el Perú y varios de Latinoamérica donde solo el 50% de los jóvenes terminan el colegio secundario, es una prioridad nacional cambiar esas cifras. Las empresas privadas deberían ayudar en eso a la política pública, no reemplazarla. La empresa privada puede ser un aliado formidable, no solo aportando dinero, si no aportando alta gerencia, espacios en interenet, tecnologías, computación, etc.

¿Hay ejemplos exitosos?

La alianza debe ser entre políticas públicas, empresas socialmente responsables y sociedad civil. Es lo que yo llamo “triángulo virtuoso”. Un ejemplo es Un techo para mi país, la mayor ONG de América Latina, con 400 mil voluntarios en 19 países y con un fuerte respaldo de empresas privadas. El resultado: 100 mil viviendas en 10 años para los sectores más pobres.

¿Pero la responsabilidad social trae beneficios a la empresa?

Según mis estudios y varios a nivel mundial, las empresas que hacen en serio responsabilidad social serán más competitivas, la gente trabajará con más compromiso y será más productiva. Tienen más sostenibilidad en el mediano y largo plazo. Las empresas que no tengan ninguna preocupación por el prójimo o la comunidad les va a ir aún peor.

Usted dijo que la empresa debe respetar el medio ambiente, ¿no hay un conflicto con las inversiones mineras?

En mi libro Recientes escándalos éticos hablo de una empresa que contaminó con plomo a todo un poblado en el Perú (8 mil habitantes). Por otra parte tenemos una empresa brasileña que se llama Natura que fabrica cosméticos con cero daño al medio ambiente. Creo que el ejemplo es alejarnos de los envenenadores del ambiente y seguir el ejemplo de Natura. Es curioso que muchas multinacionales no contaminan en su país, pero sí en América Latina.

¿Cuál es el consejo a los empresarios de nuestro país?

Nosotros no nos quedamos en el consejo si no que hemos creado el programa ‘100 jóvenes sobresalientes por una economía con rostro humano’, que yo fundé en la Universidad de Buenos Aires y ahora estamos replicando en San Marcos y en 10 países más de la región. Estamos formando una nueva generación de docentes en economía y gerencia, para enseñar responsabilidad social en las aulas. Así, formando a las nuevas generaciones, vamos a tener calidad de gestión tanto en el sector público como en el privado mucho mejor en AL.

¿Cómo combatir la pobreza?

El sector privado en Brasil estaba en pánico cuando llegó Lula y ahora lo apoyan fervorosamente porque metió a 40 millones de personas pobres como consumidores en la economía, y se le han venido todas las posibilidades al sector privado. Lo mismo ocurre en Argentina y Uruguay. Los empresarios tienen que darse cuenta de que apostar por la inclusión social los favorece. La inclusión social permitirá potenciar al sector privado, no combatirlo.

En San Marcos difunde cómo combatir la crisis con ética.

El modelo ortodoxo económico que piensa que el que no es exitoso es por responsabilidad personal está aplicando la insolidaridad. A Grecia le aplican receta tras receta sin importarle lo que está en el camino, están destruyendo el nivel de vida del pueblo griego; y eso está pasando con el pueblo irlandés, el portugués, y ahora quieren Italia.

¿Falta ética en la economía?

Absolutamente. Si hemos llegado a estos niveles de pobreza y desigualdad es porque ha habido muchos vacíos éticos.

¿Los ricos deben pagar más?

Warren Buffett y Gates propusieron eso a los 500 más ricos del mundo. Algunos los siguieron. Es un primer paso.

¿Son legítimas las reivindicaciones de los ‘Indignados’?

Hoy día el 1% más rico del planeta tiene el 43% de todos los activos, mientras que el otro 50% tiene solo el 2%. Cuando ellos dicen ‘somos el 99%’ están poniendo en la agenda mundial el tema central que es la gran desigualdad, producto de la especulación, de la codicia desenfrenada, que son destructivas para las economías de los países. Representan la indignación de la gran mayoría de la población del mundo.

¿Los empresarios gastarán en responsabilidad social?

Está demostrado econométricamente que cada dólar en salud, por ejemplo, tiene una tasa de retorno de 600% sobre la inversión. Un estudio dice que el que ayuda vive más años, tiene menos úlceras, menos ataques cardíacos y menos estrés, así que no esperen más.

Fuente: La República – Perú