Perú: El reto de Tai Heng

La empresa peruana desafió a un popular actor y cantante. Fue una apuesta en la que todos conocían el resultado de antemano.

La responsabilidad social empresarial es parte constitutiva del crecimiento de Tai Heng. El desafió que lanzó a Erick Elera fue sólo un pretexto para contribuir al desarrollo de niños y niñas de barrios carenciados de la capital peruana. El actor debía vestirse como operario de limpieza y trabajar en tareas de aseo en la tradicional calle Capón. Si era capaz, Tai Heng pagaría la apuesta con una cuantiosa donación de útiles escolares destinada a colegios del sector.

Elera cumplió su parte a medias -el público apenas le permitió desplazarse- y finalmente terminó firmando autógrafos en el local de Tai Heng. La empresa dio por cumplida la tarea y los grandes beneficiados fueron los escolares que recibieron el “pago” de este original reto.