El comercio electrónico…una corriente inevitable
1 de abril de 2009 - numero_30
{toggle createdate}“La ubicación del local comercial es determinante”. La que fue una realidad inobjetable de la administración de negocios, hoy –tiempo de tiendas virtuales– necesita ser reformulada. Una librería y papelería ya no se separa de la competencia por metros, cuadras o kilómetros
, sino por milímetros de desplazamiento sobre un mouse pad. Hoy la compra la determina un dedo índice al presionar el botón izquierdo del mouse.
Después de que se popularizó el trabajo de Tim Berners-Lee, el creador de la web contemporánea, todo cambió: el periódico de hoy se transformó en un enlace más, al igual que las transacciones bancarias, los pagos de impuestos, la compra de un libro o la búsqueda de cualquier dato de interés. Lo mas importante ahora, en lo que a ubicación se refiere, pasa por estar o no estar en la pantalla del potencial cliente, tener un catálogo accesible y fácilmente navegable, un buscador de productos, un surtido adecuado y medios de pago masivamente extendidos. Si a esto le agregamos un servicio de entrega eficiente, ya tenemos una tienda del siglo XXI.
En este punto puede que algún lector piense “esto es para los grandes, no es para mí”. Es un error, un error que puede ser el principio del fin. Es cierto que adelantarse no necesariamente es lo mejor; muchos adelantados avanzan solos, sin compañía y sin mercado. Pero si adelantarse no siempre es saludable, lo que no se perdona es el atraso, el desconocer cuál es el medio dentro del cual nos desenvolvemos. No reconocer el medio, biológica o mercadotécnicamente, lleva a la autodestrucción. Si reconocemos que la gran red ya no está en el mundo sino que el mundo está en la gran red, la construcción de presencia en Internet para el negocio, sea del tamaño que fuere, se transformará en inevitable. Existirán tiendas con existencia virtual pero no física, lo inverso se volverá cada vez más difícil de sostener.
No debiera verse como una desventaja del mundo contemporáneo el tener que generar presencia virtual. Como siempre, y siguiendo con lo que ha sido siempre nuestra línea editorial, sugerimos que se vea en ello una gran oportunidad. Un gran distribuidor o una pequeña tienda, necesitan escaparates, vidrieras, góndolas para exponer. Necesitan también atender el espacio de venta la mayor cantidad de horas posibles, ¿qué tal 24 horas, 7 días a la semana? Es agotador para cualquier persona pero no para un computador. En la pantalla puede estar convenientemente exhibida nuestra oferta, la caja siempre lista para cobrar y los artículos siempre listos para su despacho. Esto último puede requerir un vehículo de reparto, el despacho por correo o un simple mesón de entregas, para enumerar algunas posibilidades. Podemos atender una localidad, una ciudad, un país o, si nuestro negocio lo permite, el mundo.
Generando presencia Internet estaremos en los registros de Google y otros buscadores que se encargarán de comunicarle a mi potencial cliente qué es lo que ofrezco y en dónde puede encontrarme. Si hasta aquí existen todavía escépticos respecto de la necesidad de construir un negocio virtual, les hacemos una sugerencia: aunque no pongan todo su negocio en línea, no dejen de colocar, al menos, un catálogo de su oferta. La presencia virtual apoya al negocio tradicional. Hay personas que acuden en la actualidad a un almacén luego de “pasear virtualmente” por los pasillos de su sitio en Internet.
Desde el año 2000 al 2007 la cifra de usuarios Internet en América Latina creció un 300% . Son casi 80 millones de personas las que están conectadas en nuestra región. Si bien la distribución a nivel país no es uniforme, existen países como Chile en donde los usuarios conectados llegan al 42% de la población total. Sin exagerar, podemos estimar que 1 de cada 4 habitantes urbanos de nuestro subcontinente accede a Internet de manera regular. ¿Podemos dejar de tener en cuenta este dato?*.
Existen ejemplos emblemáticos en todos nuestros países. Quizás los más representativos son Prisa en Chile y Officenet en Argentina y Brasil. Sin olvidar excelentes productos como el de Aldoexpress en Uruguay, Tony en México, Ofishop en Argentina y otros más. Las dos primeras empresas destacan porque centran su negocio en sus ventas en Internet. Son pioneros en sus respectivos espacios geográficos y han demostrado que estar en el momento justo no es cuestión de suerte. Cuando los mercados y la logística de estos países sureños evolucionaron haciendo esta actividad posible, estas empresas demostraron que estaban a la altura de las organizaciones más avanzadas del mundo en este tipo de comercialización. Se argumentará que Officenet es Staples y que por esta razón han sido capaces de construir lo que ahora vemos (y algunos sanamente envidiamos). Recordemos que la empresa argentino-brasileña ya era un éxito cuando la comapñía de Ron Sargent la adquirió y, sin duda, potenció.
Si alguien pregunta cuán costoso es generar “presencia Internet”, no podemos precisarlo exactamente, podría diferir según cada país, pero podemos asegurar que es mucho más barato que automatizar el inventario. Una tienda Internet “llave en mano” con software, dominio y hosting incluido puede montarse con modestos US$ 1.000, que es una inversión que está al alcance de muchos. Una importante recomendación: no acepte software propietario. Existen estupendas aplicaciones como Oscommerce que son gratuitas, de código abierto, modificables y fácilmente personalizables para cualquier idea de negocio. Con este tipo de sistemas se paga por servicio de implementación y no gastamos nuestro dinero pagando costosas y a veces incomprensibles licencias.
¿Parece complicado cobrar vía Internet? Es más sencillo de lo que se imagina. Pueden implementase desde depósitos o transferencias, hasta el acople con servicios especializados de pago como DineroMail, PayPal o pasarelas de pago vinculadas a las entidades financieras más importantes.
El comercio electrónico no es una curiosidad o algo pensado por “otros y para otros” y que no tiene que ver con nosotros. Dentro de poco tiempo será tan popular como la telefonía celular y hasta entrará en relación directa con ella. Ojalá nos encontremos todos, virtualmente, muy pronto, podremos seguir conversando y tomar un café (¿virtual?, mejor real y de algún país cafetero).
* De acuerdo a un reciente estudio (año 2008), elaborado por Internet Havas Digital y difundido por la BBC, Chile lidera actualmente el ranking de penetración de Internet en América Latina con un 42%, seguido de Uruguay y Argentina con un 34%, y de Brasil, México, Perú y Costa Rica con un 21%.