Feria del Libro de Santiago una cita inevitable
1 de enero de 2007 - numero_21
Con la característica excelencia de su impecable organización, se llevó a cabo entre el 24 de octubre y el 5 de noviembre la 26ª Feria Internacional del Libro de Santiago en el Centro Cultural Estación Mapocho.
El lugar
Quien no ha asistido antes a esta exposición podría quedar maravillado sólo por el marco en el que ésta se realiza. La Estación Mapocho fue construida para celebrar el centenario de la independencia de Chile por el Arq. Emilio Jecquier. La admirable construcción muestra la influencia que las obras del francés Gustav Eiffel (constructor de la conocida torre), ejercieron en el estilo del proyectista chileno. El Centro Cultural está localizado en esa imponente construcción que, además de sus méritos arquitectónicos, está rodeada del halo particular que tienen todas esas grandes estaciones en donde, durante decenios, tantos llegaron o partieron.
La feria
La feria, cita inevitable para quien en Santiago –y en todo Chile– ama los libros y el mundo que gira alrededor de ellos, fue, como siempre, un éxito a todo nivel. Estuvieron presentes 700 sellos editoriales, más de 40 escritores extranjeros y se presentaron más de 110 libros.
Alrededor de 240.000 personas transitaron sus pasillos. Un tratamiento especial fue prodigado a los niños y jóvenes de hasta 18 años, quienes tuvieron entrada libre al mas importante encuentro cultural de los chilenos. Recibieron similar trato todas las mujeres en el Día de la Mujer y la tercera edad obtuvo un descuento del 50%.
Perú fue el invitado de honor y llegaron desde ese país 25 connotados autores, entre ellos, el ganador del premio Alfaguara 2006, Santiago Roncagliolo. El país de Vallejo aportó además con un ciclo de cine y con tres exposiciones permanentes.
Asimismo durante los días 25 y 26 de octubre, como es tradicional, se desarrollaron las 11a Jornadas Profesionales, las 9a Jornadas de Educación, y el 3er Encuentro de Bibliotecarios, iniciativas que contaron con la participación de destacados expertos nacionales e internacionales, profesionales del mundo del libro, además de bibliotecarios y profesores de todas de todas las regiones del país.
La 26ª edición estuvo llena de visitas ilustres como la presidenta Michelle Bachelet, el ex presidente Ricardo Lagos o la escritora María Kodama, viuda del escritor Jorge Luis Borges. Esta última, de participación destacada en el evento, defendió -en declaraciones a la prensa- la obra de su difunto esposo y rechazó las diferentes biografías que muestran a un Borges más cercano al hombre de todos los días.
En Chile, la organización perfecta de un evento es casi rutina. La 26ª Feria Internacional fue –ni mas ni menos– un excelente botón de muestra respecto de lo que los chilenos son capaces de hacer.